lunes, 31 de enero de 2011

Crítica 127 Hours

NOTA: 7.5
El último trabajo del director ganador del oscar hace un par de años, Danny Boyle, se presenta con un sobrecargo de fenómenos poco peculiares en esta emblemática adaptación de una historia real, una poco peculiar pero muy intrigante y de verdad muy vistosa. Como cualquier película que se presenta después de que su director ganara el premio mas cotizado por esta industria, las expectativas la sumergen hasta un punto mas que peligroso, y que en esta ocasión terminan por atentar con la dinámica reedificación que escandaliza a esta producción, no apta para cualquier persona. Y es que "127 Hours" es un sublime recuento de muchas ilusiones albergadas en la incapacidad de mantener la cordura en una situación de gran peligro, y en su trama las demuestra fielmente con el toque tan distinguido que ofrece la mano de un director que se caracteriza por resaltar detalles que quizás otros ni se preocupen. Boyle se arriesga, pero de alguna forma termina triunfando, su idea era complicada, al igual que otras cintas de el año pasado, esta la mayor parte de su metraje giraba en torno a un solo montaje, a un solo actor y a unos enumerables objetos. Y la verdad es que sin ser lo que tanto me esperaba, la cinta termina por gustarme, tal vez por su innovador atractivo, quizás por la forma en que Franco resalta su sufrimiento o también por el simple hecho de que soy fan de este director.

"127 Hours" en su capacidad de sofocar, lo hace hasta el punto en que la cinta se desenvuelve en un ámbito de crueles situaciones, ya sean imaginativas o de locura. Nótese los momentos en que Boyle dispone de imágenes de bebidas llenas para recalcar la angustiante sed del protagonista, ¿Punto a Favor?, depende exclusivamente del espectador. La música y las canciones resultan otro acierto, y la fotografía, como una simple y grandiosa obra de culto. Pero el problema a mi parecer recae en las exageraciones que utiliza como arma de doble filo, un ejemplo, la pantalla partida en tres no fue de mi completo agrado y menos el "Picture in Picture". Pero, es importante destacar el buen manejo en las escenas de sufrimiento, y también en la relación adversa que se mantiene hasta el punto en que ocurre la escena más llamativa. El personaje de James Franco resulta ser de lo más carismático posible, y es por eso que su actuación se valora tan inmensamente. Su interpretación resulta digna de todos los elogios que ha recibido, pero algo tampoco termina por cuadrarme en ella. Ah!, y por último término por expresar mi alegría de haber visto nuevamente a Clémence Poésy en acción. Sin dudas un trabajo novedoso, fiel a la dinámica de Danny Boyle, pero con momentos de gran división que pueden en demasía gustarte o simplemente lo contrario.

2 comentarios:

Christian dijo...

Comparto totalmente tu crítica Vito, es mas, ambos le pusimos la misma nota a la película. Tenía las expectativas muy altas con 127 Horas, y tras verla, no las llenó todas. Me gustó más Buried.

Muy buena crítica Vito, Saludos!

Daniel Bermeo dijo...

Pues bueno, sí, es una gran película. Mw gustó ligeramente más que tu, pero lo grandioso de todo esto está en la portentosa actuacion de Franco y la gran direccion de Boyle...

Saludos!